"Un siniestro hombre medieval, pero soberbiamente gótico, como los obispos labrados en los bancos o en los portales. ¡Y pensar que alguna vez la gente se burló de las actitudes al estilo vitral! Son las únicas que pueden tener los eclesiásticos. La visión del obispo, al que observé con fascinación, me insufló el sentido del gran realismo del arte gótico. No existe la pose en el arte griego ni en el gótico. La pose fue inventada por los malos retratistas."
Oscar Wilde a Robert Ross, abril de 1900
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